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ESPIRALES DE LA FICCIÓN

 

Por Marta Rosa Mutti

 

Desde tiempos que se esfuman decir poesía era concebir un todo sinónimo de armonía, elegancia, pureza, perfección. Un concepto de belleza idealista e idealizado. Si añadimos a esta idea una construcción de verso medido y rimado, estamos frente un texto armonioso y musical, de por sí considerados poético. Ahora bien ¿qué pasa hoy con estos conceptos?
Los percibimos pasivos, inmutables, o los hemos ido dejando relegados porque experimentamos una suerte de transmisión que nos impulsa a la acción, y que es un modo de recrear el mundo. Todos, inmersos en la realidad y enfrentados a ella, actuamos (aún en la inacción) modificándola. En el contacto con las cosas y con los otros nos exaltamos.
Atracción y rechazo, conmoción. Extrañeza y sentimiento, poiesis (del griego creación). Las palabras y su sintaxis entonces, resultan en el medio y modo en que toman cuerpo esas sensaciones y percepciones, donde sentidos y razón se conjugan. Pero el vivir es una constante evolución en la que el universo se resuelve, lo que fue no es y lo que está transcurriendo no será.
La poesía se desprende del hombre y por lo tanto cambia junto a él.

 

Se suelta en el verso libre con Whalt Whitman

Estos son en verdad los pensamientos

Estos son en verdad los pensamientos
de todos los hombres en todas las
épocas y naciones, no son originales míos,
si no son tuyos tanto como míos,
nada o casi nada son,
si no son el enigma y la solución del enigma,
nada son.

 

Se presentifica con Juan L. Ortiz

Fui al río

Regresaba
¿Era yo el que regresaba?
en la angustia vaga
de sentirme solo entre las cosas últimas y secretas.
De pronto sentí el río en mí,
corría en mí
con sus orillas trémulas de señas,
con sus hondos reflejos apenas estrellados.
Corría el río en mí con sus ramajes.
Era yo un río en el anochecer,
y suspiraban en mí los árboles, 
y el sendero y las hierbas se apagaban en mí.
¡Me atravesaba un río, me atravesaba un río!" Del libro "El ángel inclinado" (1938)

 

Se condensa con Rosario Castellanos

Trayectoria del polvo

He aquí que la muerte tarda como el olvido.
Nos va invadiendo, lenta, poro a poro.
Es inútil correr, precipitarse,
huir hasta inventar nuevos caminos
y también es inútil estar quieto
sin palpitar siquiera para que nos oiga.
 
Cada minuto es la saeta en vano
disparada hacia ella,
eficaz al volver contra nosotros.
 
Inútil aturdirse y convocar a la fiesta
pues cuando regresamos, inevitablemente,
alta la noche, al entreabrir la puerta
la encontramos inmóvil esperándonos.
 
Y no podemos escapar viviendo
porque la Vida es una de sus máscaras.
 
Y nada nos protege de su furia
ni la humildad sumisa hacia su látigo
ni la entrega violenta
al círculo cerrado de sus brazos.

 

Podemos afirmar entonces que el pulso de la palabra en su connotación puesta sobre lo que actuamos nos lleva a la poesía y entonces la "cosa" ya no es más lo que era, sino que hemos vuelto a crearla a nuestra medida. La poesía está relacionada justamente con esa re - acción profunda, esa conmoción, esa emoción que experimentamos enfrentados a la realidad. La poesía es esa emoción.

Poesía del instante. Suddem Poetry. Es aquella que nos surge de repente y con urgencia y que se resume en unos pocos versos que condensan un significado que irrumpe con un estallido.

Soñándome descalza
con palabras desnudas.
dejo de ser un pensamiento
porque tú me piensas,
ahora libre golpeo a tu puerta.

Sobre escribir poesía decía William Faulkner

Soy un poeta malogrado. Quizás todo novelista quiere escribir primero poesía y descubre que no puede, y entonces intenta escribir cuentos, que es la forma más exigente después de la poesía, y, al fracasar, sólo entoncess. se dedica a escribir novelas.

Leopoldo Marechal solía opinar: Desconfío de los escritores que no empezaron haciendo versos. Leopoldo Marechal solía recordar que, para Aristóteles, todos los géneros de la literatura son géneros de la poesía, y Ray Bradbury aconsejaba leer todos los días un poema antes de ponerse a escribir un cuento o una novela.

Para cerrar, Abelardo Castillo nos dejó: Todo escritor verdadero es esencialmente un poeta. Ser poeta no significa escribir en verso, ni el puro acto mecánico de versificar garantiza la poesía.

 

 

 

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