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Sueño 5:

por Marta Rosa Mutti

Una vaca arriesgada

Simona es una vaca blanca y negra pero algo rara.

No tiene manchas, tiene lunares y una cola que termina como un plumero.

Un día Enriqueta se la pidió prestada para limpiar los muebles de su casa que estaban cubiertos de arena, porque las casas en Tranquilandia están muy cerquita del mar.

Simona dijo muy alarmada:

—¡Ay, qué dolor! Y huyó aterrada. No volvería a usar la cola para las fiestas de gala ni para espantar a las moscas, ¡Con lo que pican!

Corrió y corrió hasta que se hizo de noche, fue entonces que vio la escalera.

Miró hacia donde llegaba, pero... ¡Ay!, se perdía en la luna.

Que sí, que no, Simona se animó, eso sí, antes se sacó los zapatos de taco alto y sin miedo paso a pasito llegó. Pensó, ¡qué lugar tan sereno!, me voy a quedar a vivir.

Como en la luna es la única vaca que se atrevió a tales alturas, las estrellas la han nombrado reina, y desde que Simona vive allí recibe a todos los que van de visita con un vaso de leche sola o con chocolate porque en algunos lugares el polvo lunar es de chocolate, pero chist…nadie hasta ahora lo sabe.

Eso sí, hay que ser arriesgado como Simona y subir muy, muy alto. ¿Cómo cuánto?

y.… ¡Hasta la luna!

 

 

 

 

 

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Diseño e ilustraciones: Eugenia Martínez (eugmartinez@gmail.com - https://www.facebook.com/EugeniaMartinezMosaico)