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Antología

A. Acosta - M.López-Camporro - C.Berardi - L.Blasco - G.Jaime-Irusta - M.Aulicino - L.Elorriaga - C. Florentín-Cabrera - M.D´Angelo - K.Medina-Cuenca - E.Migliaro - N.Martínez - C.Guala - S.Santilli - D.Fernández - M.Leone - J.Schuster - P.Moltedo - M.Cárdenas - M.Mutti - O.Tasca - N.Vinciguerra - J.Dal-Favero - H.Trezza - A.Merel

Julia Mansi
Julia Mansi

Ángela Acosta - Santa Teresita, Pdo. de la Costa

Utopía

Difícil mundo, en el que somos como extraños que olvidamos que la vida no es nuestra, sino un tiempo para transitar. Alejados del amor, la solidaridad, la verdad parecemos huir de la alegría y de la paz. Todo se ve lejos, ajeno, o no se alcanza. ¿Será que nos hemos convertido en una utopía dónde somos una ilusión? ¿Existimos?

 

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Mirian López Camporro

Entre cuentos y relatos

Soy afortunada, rica, multimillonaria. No busquen mi enorme capital en cuentas bancarias. No existe plazo fijo que lo aumente, ni bolsas de comercio que peleen las acciones. Mi gran tesoro está cuidadosamente protegido en un rincón de mi alma. Las musas hacen vigilia permanente, y crece, aumenta día a día. Me encargo en persona de alimentarlo. Sé lo que le gusta. Elijo con esmero y placer el menú. Tengo a mano los mejores chef: Benedetti, Neruda, Cortázar... Lo condimento con otros contemporáneos, ignotos, timoteos, talentosos. Soy dueña de una gran fortuna. Puede impresionar, puede emocionar, a veces llega a inspirar y otras tantas serán criticadas. Está al alcance del corazón. No pretendas asirla con tus manos, es inquieta, escurridiza... su hábitat natural está en tu alma y en la mía. Mi fortuna es la palabra. Y sale al ruedo, a veces sumisa con su maquillaje de metáforas, con su peinado de ilusión y su traje hilvanado de sueños. Juguetea infantil entre cuentos, poesías y relatos. Otras veces aparece impiadosa, rebelde, cruel logra sangrar el papel. Tiene el color que elijas y se amolda fácilmente a tu placer. Es compañera inseparable, siempre está allí. ¿Cómo no protegerla? ¿Cómo no alimentarla? ¿Cómo no agradecerle su humilde presencia?

 

Susna Alicia Santone
La fuerza de la creación - Susna Alicia Santone (Mar Del Tuyú, Partido de la Costa)

 

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Cayetano Berardi

Eso eres...

No te desnudes todavía amor. Déjame imaginar lo hermoso de tu cuerpo, debajo de tu sonrisa.

Te quise retratar y… pinté un árbol. Insisto, aparece un río, reitero y sale un sol, comienzo nuevamente y descubro un horizonte, repito y logro un cielo azul, finalizo y es el más bello paisaje, eso eres ¡tú…!

 

Susna Alicia Santone
Caras y Caretas - Susna Alicia Santone (Mar Del Tuyú, Partido de la Costa)

 

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Liliana Blasco

Tus manos

Mi desvelo somnoliento comienza en tu mirada. Continúa en una pequeñísima mancha en tu párpado inferior izquierdo y baja hasta tu boca, y me detengo congelando tu labio con mi beso. Retomo mi recuerdo y aparecen tus manos, ah, tus manos… que exceden toda tregua, todo remordimiento ¿Cuál es tu nombre? ¿Tu deseo? ¿Con qué pieles te acercas? Me tomas, me desvistes, me trasciendes. Dejando mi alma tan expuesta.

 

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María Graciela Jaime Irusta

Ciudad a solas

El día vuelve a empujar su estrella calcinada. La vereda guarda aún la humedad de la noche mientras el cartonero recoge los hilos de la ciudad dormida. Tiene el gesto fatigado y los ojos huecos. Sus manos embarradas buscan algún tesoro inesperado. Amanece y él es un niño sonámbulo que encuentra máscaras invisibles y llora con los árboles.
La mañana cruza las calles sobre zancos de humo y la vida prosigue, lenta, como una danza cubierta de niebla.

Claudia Carolina Lattanzio
Claudia Carolina Lattanzio

 

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Marisol Aulicino

Guerrera de Palabras

Luchadora incansable voy debatiéndome en mi océano de palabras. Amazona solitaria, fui entrenada para pelear hábilmente con mi habla. No le tengo miedo a nada, mi escudo es mi pensamiento mi escritura, mi arma. No me daña ni tu lanza, ni tu espada, pero me hiere tu silencio de plata. No te ampares tras la distancia dame una revancha, te reto a un duelo de palabras.

 

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Luis Elorriaga

Deambular

A veces me gusta deambular en nubes de humo blanco que orillan mi pasado. No es que me aleje de la vida, es que extraño la sorpresa de tus ojos. Ahora tu mirada escruta silenciosamente mi corazón entumecido y ardiente. Un nudo oscurece esa zona de derrumbe que ancla en el océano. Quizás deba renunciar a esa voz que acecha en las penumbras del amor.

 

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Carmen Florentín Cabrera

El soplo

Lo que guardo de lo que guardas es más de lo que imaginas que has vivido, porque guardo desde tus pensamientos que conozco cuando me miras, hasta el miedo que habrás sentido cuando te lo dijeron: “espanto, asco, miedo, soledad” fue ahí donde te detuviste y no quisiste vivir. Ahora no eres una hoja que vuela con el viento, no eres mía, no eres de él, un soplo de la vida te llevó tan alto que prefieres estar sola a que te vuelvan a hacer daño.

 

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Matías D’Angelo

Foto

Una foto en mi pecho, un sopor, la oscuridad. La luz se filtra entre mis párpados. Click.
Volvimos. A esa tarde en la playa, sanados por el mar. Para recuperar esas pisadas en la arena. Esas risas y cantos. Nuestro médano, una manta y el mate.
Nunca volvimos. Nunca nos fuimos. Click.

Pablo Alonso
Bodegón 3 - Pablo Alonso - San Clemente del Tuyú, Pdo. de la Costa - 2014 -
Técnica: Lápiz, lapicera blanca en gel Sobre Papel (20 x 30 cm)
http://www.alonsopablo.blogspot.com.ar/

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Karina Soledad Medina Cuenca - Las Toninas, Pdo. de la Costa

Los días

Conciencia, amiga silenciada en este tiempo he notado que en las noches y en los días te he encontrado vencida. En mis raptos de lucidez te he visto rendida. Amiga, en mis manos el puñal, en el alma, la herida. Es fallarte, es fallarme. Es la constante huida de esta vida, que siempre, siempre te ha dejado dormida. El saber no me ayuda, el comprender no me consuela. El destino lo ha dicho: esta es mi condena.

 

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Edith Migliaro

Inhumano

Creer en Alá, en Jehová, la tierra prometida, la ancestral. La razón no importa, la política es inútil. Los misiles no tienen alma, matan niños, ancianos, mujeres e inocentes. Paredes caen, edificios destruidos, vidas desperdiciadas. No existe ejército de paz, una mentira, una utopía, Hoy solo dolor, destrucción. Barbarie o civilización, científicos geniales trabajando para conquistar el universo.¿Y el mundo que nos rodea? ¿La sabiduría no alcanza para aprender a tolerarnos? ¿La indiferencia nos consume, la prioridad es el dinero? ¿En qué nos hemos convertido? Necesito creer en la compasión del hombre, necesito creer en la coherencia, necesito armonía.

 

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Nancy Martínez

Sin Tiempo

Decreto en este instante liberarme de las cadenas del pasado, ser libre de alma y cuerpo. Mi mente fluye aguas de amor transparente, fresco. Hoy puedo y quiero cambiar de dirección mi destino. Crear con un nuevo corazón un lugar donde guardar tus besos y las caricias de tus alas y este instante donde el deseo me funde en un eclipse de pasión con el fuego de tus miradas.

Pablo Alonso
Inconsciente Sereno - Pablo Alonso - San Clemente del Tuyú, Pdo. de la Costa - 2008 - 2009
Técnica: Acrílico y microfibra sobre papel (43 x 35 cm)
http://www.alonsopablo.blogspot.com.ar/

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Claudia Guala

Entre melodías

Decidiste irte... y el cielo se puso gris y alguien sonrió entre melodías, mientras una guitarra aguda no dejaba de vibrar...
…No te has ido. Te escucho, tus ojos grandes y claros siguen brillando aquí.
“Poder decir adiós es crecer” ...y el adiós descubre nuevos motivos para despertar...
Despierten gritabas desde la profundidad en este tiempo insólito, demoníaco.
No regresaste, no, o quizás nunca te has ido
-¡Hola qué tal!, sé que estás aquí....

 

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Silvia Santilli

Recuerdos

Opacas y amarillas están las fotos que evocan nuestros encuentros. Aquellos días donde el viento era incapaz de lastimar nuestros rostros y el reflejo de la mirada hablaba de los momentos vividos. ¿Recuerdas? La primera vez bajo una cascada de luna no rechazamos el amor nos dejamos amar mientras el sol acunaba nuestro sueño de amor eterno. Éramos jóvenes y no sabíamos que la vida está llena de sorpresas.
Aprieto sobre mi pecho estos recuerdos para decirte que permaneces en el puerto de mi alma y que el olvido no existe cuando anida el deseo de volver a ver.

Pablo Alonso
El Bar - Pablo Alonso - San Clemente del Tuyú, Pdo. de la Costa - 2008 - Técnica: Acrílico y microfibra sobre papel -
http://www.alonsopablo.blogspot.com.ar/

 

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Dolores Fernández

Sombra

Hola ¿hay alguien aquí?
Todas las noches, al abrir la puerta, espero respuesta. Crujen las maderas. Huyen las cucarachas a sus barricadas. Golpean los postigos revelando que ha llegado el intruso. Cae la gota herrumbrada en la pileta oscura donde una taza rota resiste la orfandad. Escalón por escalón sube mi pena. Solo quiero dormir. Quizá despierte con un rayo de sol besándome la cara, entre sábanas limpias, con aroma a café perfumando la casa.

 

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María Leone

Espejo

Buscaba su rostro, la imagen devolvió solo un bosquejo añoso. Los ojos querían cegarse de luz, recibieron tinieblas. Los labios intentaron una sonrisa, hallaron una decepción. Sus brazos se extendieron para recibir consuelo, la devolución fue la nada. Las gotas que suponía de sudor, eran en verdad sangre. Solo las lágrimas continuaron siendo lágrimas y el corazón, su corazón, de latidos a veces lentos, otras enloquecidos, no entendiendo de compases y armonías. ¿Iba a culpar al desamor? No, simplemente fue la vida, que así se lo planteó.

Julia Mansi
Julia Mansi

 

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Juana Rosa Schuster

Incertidumbre

¿Por la mañana, me despierto, o cambio de sueño?¿Por la mañana, siento la firmeza de tu mano, o son las mías atenazadas?
¿Por la mañana, deambulo por los cuartos, o soy parte de la hojarasca débil que arrastra el río?¿Por la mañana, te recuerdo en la bruma mundanal de mi existencia, o son visiones ante mis ojos?¿Por la mañana, siento el sol como en un párvulo verano, o es tu cálido aliento junto a mi rostro?
¿Por la noche, habrá un postigo que cierre mi agonía, o será la muerte puntual y esperada?

 

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Patricia Moltedo

El sol rojo

El sol rojo y pleno caía, y la arena rasguñaba la piel, ella no lo sentía, solo volaba, entre las estrellas, que vendrían, y la confundirían. Pero ahora solo bailaba a su son. Sones familiares y desconocidos. Jamás se conocen. Fue Saturno o Neptuno, el que surgió, y danzaron, se remontaron, para luego dormir, reptar, planear, y suponer lo que es vida. Nada presume, que el precipicio está cerca o es tan solo un médano… Cuando despertó su piel estaba hecha girones, ardía el fuego estaba allí, o era su alma, las estrellas reían, muy fuerte, se escuchaban en todas partes, por más que huyera, se las oía… por todas partes…

Susna Alicia Santone
Raíces - Susna Alicia Santone
(Mar Del Tuyú, Partido de la Costa)

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María Del Carmen Cárdenas

ÍO

Amante elegida por el soberano. Cuando a orillas del lago peinaba sus cabellos, él los teñía con rayos de sol.
La luna cubría sus brazos, sus pechos, su vientre. Para que su amor ahogara gritos de gozo en nubes de algodón. Hasta que Hera, celosa, un día le envió su espina. Aguda. Poderosa.
Sus pelos se erizaron. Fueron crines. Sus manos leves trocaron en pezuñas. Y comenzó el aullido de su loca carrera. Se lanzó al universo para olvidar su ruindad.
Cuentan que en tierras lejanas, la amante de Zeus concibió su hijo y se transformó en deidad.

 

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Marta Rosa Mutti

Espiral

En el lugar donde soy no tengo más que palabras. Algunas me aceptan, otras me rechazan. Se apilan, se desparraman, construyen historias, seres, distancias, afectos, iras, enigmas, sabores, amores, pasiones. Aguas transparentes y ruidosas corren en ellas. Un espiral de llanto, viento, lluvia y risas las agita. Se muestran angeladas pero el fuego las posee. A veces me inquietan. La vigilia no les alcanza, pretenden hasta mis sueños. Temen que me extravíe en algún papel o me atrape el olvido detrás de una historia, de un verso o de un personaje perdido.

Claudia Lattanzio
Claudia Carolina Lattanzio - Santa Teresita Pdo. de la Costa

 

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Olga Tasca

Gotas, gotas, gotas…

Se ha recostado el sol, y tú en compañía de tus hermanas se agrupan sin querer ocultarlo para caer de improviso borrando las grietas de la tierra. Dando alimento a las plantas y brillo a sus hojas. Caes en el vidrio de mi ventana. Te sigo con mis dedos hasta que vas a dormir para amanecer otra vez.

 

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Norma Vinciguerra

Te toco

Tanto tiempo falta para llegar que el camino se hace eterno. Los novecientos kilómetros por hora no son suficientes. Desde arriba abrazo la tierra y el océano. Tan lejos y tan cerca que puedo tocarte y te toco. Estoy en la mitad. Cierro los ojos y doy oídos a las escenas del adagio que hace menos ansiosa la espera. El descenso hacia la pista es atronador. Arrastro la maleta por la cinta mecánica. Se pone en marcha el encuentro. Estás tan cerca que puedo tocarte y te toco.

Julia Mansi
Julia Mansi

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Julio Dal Favero - Santa Teresita Pdo. de la Costa

La vida da revancha

La vida me da revancha a través del cristal de tu risa. Tu imagen se transforma como espejo que refleja la luz que ilumina una ilusión. Yo no soy poeta para cantarle al amor pero no es difícil sentirse inspirado, solo basta con mirarte para volver a soñar. Sí, la vida da revancha y los dos la necesitamos para volver a creer que el campo seguirá con flores. Que podemos seguir de la mano porque el sol saldrá también para nosotros cada mañana.

 

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Hilda Trezza

Enlazados en la maraña

Asperezas del alma tan calladas, vacilante, no queriendo saber ciertas cosas que gimen aquí muy dentro mío. Dentro muy dentro hasta morir entre los recuerdos. Horarios de sueños dormidos, permanecen allí, esperando sin pausa. Invaden presencias, trato de hacerlos presentes aunque no se vean. Tantos recuerdos asoman que ya no los contengo, esos que aún dormida buscaré tenerlos. Serán perfectos, inquietantes, ciertos, quizás iré a buscar a aquellos que se fueron lejos. Ando y me protegen, acompañan enlazados en maraña, estos son mis sueños, integrándose en mi cuerpo que descansan esperando la mañana.

Pablo Alonso
Pailevot Davinson 3870 - Pablo Alonso - San Clemente del Tuyú. Pdo. de la Costa - 2008 - Técnica: Acrílico sobre Papel (35 x 50 cm)
http://www.alonsopablo.blogspot.com.ar/

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Adrián Merel

Con los mismos labios

Caen las bombas desde los noticieros y la bolsa en Wall Street. Caen los ángeles que esconden cada noche y en un rincón cae una ilusión desnutrida y sin piernas. ¡Meras coincidencias! Las del estruendo de tus párpados cayendo. Inaugurando sin saberlo la ausencia desgarrada de mi destino. Y allí te abrazaré con cenizas desnudas de tibieza. Con los mismos labios que callan todo. Una postal estática. Roída. Y este cadáver que ocupa casi todo, allí.

Susna Alicia Santone
Susna Alicia Santone - (Mar Del Tuyú, Partido de la Costa)

 

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