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¡Lope de Vega lo hizo!
Por Rodrigo Moral
En 1562 nace Félix Lope de Vega y Carpio, un auténtico amante de las letras y de las mujeres.
Su trabajo fue tan prolífico que lo llamaron el “fénix de los ingenios”. Él mismo declaró haber escrito 1.500 piezas dramáticas aunque se conservan 426 comedias de las que sólo 314 son seguras suyas, y 42 autos sacramentales.
Lope fue un aventurero íntimo. Los turbulentos azares de su vida fueron en esencia sentimentales y afectivos. No podríamos conocer detalles tan recónditos de su existir si el propio poeta no los hubiera traspuesto en su obra literaria. Sus versos cultos plasman de forma casi inmediata las tormentas que pasaba su alma. Incluso en la poesía épica encontramos alusiones a sus odios y amores, a sus momentos de felicidad o amargura.
Aunque estimaba poco a Cervantes, su contemporáneo, Lope dijo de él que jamás le faltó gracia ni estilo. Por su parte, el padre del Quijote lo llamó “monstruo de la naturaleza” por la abundancia de sus dotes y hasta hay textos que atestiguan su frustración como autor dramático por el triunfo del fénix.
Como uno de los máximos exponentes del Siglo de Oro (periodo de tiempo que abarca más de cien años y que incluye el pasaje del estilo renacentista al barroco) que incluye entre otros a Tirso de Molina y Quevedo, Lope funda las directrices del nuevo teatro español. Comienza por derribar las murallas entre lo cómico y lo trágico, tratando de imitar a la naturaleza humana misma. Escribe en verso, con variedad de metros (predomina el octosílabo) y estrofas conforme a las exigencias del argumento. Adopta la división en tres actos y escoge temas de muy variada naturaleza, pero de clima intensamente español: de historia antigua y extranjera, religiosos, mitológicos, de enredo, etc. Especialmente importantes son las obras inspiradas en temas de la historia y leyendas españolas, con que contribuía a la forja de una conciencia nacional. Aquí es donde entra Fuenteovejuna. ¿Cómo llega a ser su obra clave?
Antes de seguir cabe destacar que Fuente Ovejuna existe. Es un municipio muy pequeño de la provincia de Córdoba, en España. Actualmente cuenta con alrededor de 5000 habitantes y aún conserva el estilo arquitectónico tradicional. ¿Qué sucedió entonces en esta villa aparentemente tan pequeña y pacífica para que Lope de Vega escribiera sobre ella?
Hagamos un poco de historia. Allá por 1476, algunos años antes de que la reina Isabel apoyara a Colón en su viaje, España aún no existía, sino que parte de su territorio se llamaba Castilla. Fuenteovejuna (como se escribía en aquella época) estaba en manos del comendador Fernán Gómez de Guzmán. Éste, a su vez, debía rendir cuentas al maestre Rodrigo Téllez de Girón, que con solo 16 años tuvo que hacerse cargo de muchos poblados que pertenecían a la Orden de Calatrava. Su edad lo hacía muy influenciable, sobre todo para Fernán.
A nivel de la realeza además estaba sucediendo algo muy curioso. El rey Enrique IV tenía una hija llamada Juana que sería la sucesora natural del trono. Pero al monarca lo llamaban El impotente, y a Juana, la beltraneja, por el rumor de que fuera hija biológica de Beltrán de la Cueva, duque de Alburquerque. Es por esto que había quienes pugnaban porque la hermanastra de Enrique, Isabel, fuera la sucesora y próxima reina. Rodrigo Téllez de Girón era partidario de Juana.
Pero como dice el refrán, en pueblo chico infierno grande. El comendador, señor feudal al que debían rendir tributo (pagar impuestos) los pobladores de Fuenteovejuna, era un hombre arrogante y prepotente que abusaba de las mujeres del lugar. El uso violento de la fuerza esgrimido fue tal que el pueblo decidió levantarse contra él, acto que culminó en su muerte.
Lope escribió esta comedia (nombre genérico dado a cualquier pieza teatral larga) 136 años después de los hechos históricos, como si nosotros hoy hiciéramos una obra con el contexto de la Campaña al desierto de Roca. El documento histórico fuente de inspiración para el autor fue Chrónica de las tres órdenes de cavallerías de Santiago, Calatrava y Alcántara en la qual se trata de su origen y succeso y notable hechos en armas de los Maestres y Cavalleros de ellas... de fray Francisco de Rades y Andrada fechado en 1572.
De aquí parte Lope para escribir su obra. Ya tenía suficientes condimentos para una buena historia, pero sobre todo es el corte social lo que con el tiempo la engrandeció: al grito de ¡Fuenteovejuna lo hizo! los habitantes resistieron los azotes del juez para averiguar quién había sido el asesino del comendador. Así, éste sería uno de los primeros casos en que el pueblo es enaltecido como protagonista. Es la villa entera que se pone de acuerdo para ir contra la nobleza, para contestar los abusos y tomar su destino en mano propia. Es el testimonio más fuerte en la literatura de que el pueblo puede tomar decisiones, al punto que algunos autores deslizan que sienta un precedente para la democracia moderna.
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